Bajo este epígrafe nos centramos en las consideraciones metodológicas de esta guía, con especial referencia al papel central que tiene el profesor de judo (“el profesor descalzo”) para recuperar la dimensión educativa y social a través del proceso de enseñanza-aprendizaje.
Señalamos también los criterios de evaluación que consideramos más pertinentes para el desarrollo del programa. Y cerramos el apartado con unas recomendaciones para los profesores de judo y algunos consejos que deben presidir las actuaciones de los alumnos en el dojo.